¿Por qué hay personas que le temen a las agujas?

Uno de los principales motivos de asistencia a terapia psicológica son los trastornos fóbicos, entre los que se ubica el miedo a las agujas que muchas personas sienten. 

Si bien es cierto que las agujas pueden provocar dolor si se hace un uso violento de estas, la fobia a las agujas o belonefobia se caracteriza porque la persona sufre un terror irracional y una gran ansiedad que puede llegar a ser incapacitante.

La belonefobia causa, por ejemplo, que un individuo sea incapaz de ir a un centro de salud por el miedo irreal que siente hacia estos objetos. Uno de los síntomas característicos de las fobias es que el individuo fóbico intenta evitar el estímulo que le causa esta reacción de malestar.

Qué es el miedo a las agujas

Para muchas personas, el miedo a las agujas no se manifiesta más que en momentos puntuales, como cuando deben vacunarse o sacarse sangre. No obstante, hay quienes sufren este miedo de manera más frecuente, dado que tienen que atravesar situaciones relacionadas con agujas con mayor frecuencia. Por ejemplo, los diabéticos o aquellos que deben tener una vía puesta constantemente para recibir medicamentos, por ejemplo. Hay quienes padecen la fobia a las agujas, conocida como belonefobiaHay quienes padecen la fobia a las agujas, conocida como belonefobia

El miedo a las agujas es una fobia, y como tal, pertenece al grupo de los trastornos de ansiedad. Se manifiesta como un miedo intenso, irracional y persistente hacia algunas situaciones en las que puede estar presente el estímulo fóbico, es decir las agujas, pero también hacia las jeringas y la posibilidad de recibir inyecciones, igual que la tripanofobia o miedo a las inyecciones.

La belonefobia tambié suele asociarse y, a veces confundirse, con el miedo a la sangre (hematofobia) o el miedo a los objetos punzantes (aicmofobia). 

Este tipo de fobia se enmarca dentro de los trastornos fóbicos específicos, que son generalmente temores a ciertos objetos o situaciones. Por ejemplo, puede existir el miedo a los gatos, las arañas, las serpientes o el miedo a volar.

Cuáles son las causas del miedo a las agujas

Las fobias suelen ser miedos aprendidos. Estos miedos se desarrollan por un tipo de aprendizaje asociativo llamado condicionamiento clásico, tras un acontecimiento traumático. Por ejemplo, después de tener una mala experiencia con agujas, con gatos, con cucarachas, entre otros desencadenantes del miedo.

De hecho, la comunidad científica explica que las fobias se aprenden, y una de las figuras que más ha aportado en este sentido es John Watson, un psicólogo estadounidense que en los años 20 provocó que un niño llamado Albert desarrollara un miedo irracional hacia una rata blanca a la que anteriormente adoraba.

El experimento tenía como objetivo observar las reacciones emocionales del niño, que al principio jugaba con el animal con total normalidad. Sin embargo, a lo largo de las sesiones, se presentaba la rata junto con un fuerte ruido que asustaba al pequeño. Tras varias presentaciones de ambos estímulos conjuntamente, el pequeño Albert fue desarrollando miedo a la rata aún sin la presencia del fuerte ruido.

Pero las fobias también pueden aprenderse por observación, en lo que se conoce como condicionamiento vicario. Esto significa que la persona puede ver como un individuo grita cuando le van a poner una inyección y puede desarrollar un fuerte miedo hacia las agujas.El miedo a las agujas puede ser incapacitante para quienes lo padecenEl miedo a las agujas puede ser incapacitante para quienes lo padecen

Pero estas no son las únicas versiones. Hay algunas que afirman que los seres humanos se encuentran biológicamente predispuestos a sufrir fobias, ya que el miedo es una emoción adaptativa que ha sido clave para la supervivencia porque provoca una respuesta de lucha o huida, tal como lo indica el sitio Psicología y mente. Es por eso que el miedo tiene que ver con las zonas primitivas del cerebro y de desarrollan por asociaciones primitivas y no cognitivas. 

Cómo se trata el miedo a las agujas

El tratamiento de las fobias se puede abordar a través de distintas terapias psicológicas que funcionan. Sin embargo, la más empleada es la terapia cognitivo conductual.

Esta forma de terapia emplea diferentes técnicas, y para tratar fobias, las más efectivas son las técnicas de relajación y las técnicas de exposición. Una técnica que combina ambas es la desensibilización sistemática, que consiste en exponer al paciente de manera gradual al estímulo fóbico, pero antes debe de haber aprendido diferentes estrategias de afrontamiento, como las mencionadas técnicas de relajación.

Otros tipos de terapia que se ha mostrado efectiva son la terapia cognitiva basada en mindfulness o la terapia de aceptación y compromiso, que pertenecen a las terapia de tercera generación. 

Fuente: https://www.iprofesional.com/health-tech/330002-por-que-hay-personas-que-le-tienen-miedo-a-las-agujas