El actor estrena el filme «Las corredoras», junto a Carola Reyna y Alejandra Flechner.El director Néstor Montalbano pensó en su personaje como en una «Evita con fusil».No descarta un regreso de «Peter Capusotto» y dice que hace humor porque tiene angustia.

Diego Capusotto, desconocido: vivir de dar charlas, escribir poesía y la aclaración de que Macri no lo echó de la TV​ Pública

Ahí está Capusotto. Una alegría verlo, saber de él, en un rato darle un abrazo. Ahí está en uno de esos días de promoción, periodísticamente prostibularios, dando más de una docena de entrevistas a propósito del estreno de Las corredoras, una película extraña dirigida por Néstor Montalbano -se estrena el jueves 23 de mayo-, donde el actor hace un doble papel.

A Diego Capusotto lo reconocerías a dos cuadras de distancia. ¡Ese pelo! Insoslayable su querida presencia. «Llevo cinco horas hablando con periodistas”, dice con el cansancio acumulado en los párpados. “Hago todo hoy y listo, no me agarran más». El tour de force es en el aula magna de una facultad. Entre un periodista y otro pide un pequeño respiro para revisar el teléfono y comer una medialuna.

-¿Te habíamos perdido de vista o esta película es lo primero que hacés después de “Peter Capusotto y sus videos”?

-No, hubo uno obra de teatro, Tadeys, en el Teatro Cervantes, tuve un par de películas y estoy con un espectáculo con mi amiga Nancy Giampaolo. Una especie de reportaje público, donde encontramos un espacio interesante que puede resumirse en una cosa biográfica a modo de entrevista, más o menos como lo que estamos haciendo ahora vos y yo…

-¿Pero se paga entrada?

-Sí, sí, hay charla, pantalla, videos…

-O sea, cobrás las entrevistas. ¿Deberíamos sentirnos privilegiados?

-¡Claro, jajaja, al fin se me dio! Pero se armó algo lindo, de verdad. En junio se hace el próximo, venite y me contás que te parece. Creo que es lo más interesante que hice en los últimos años. También escribí un libro de poesía (Lo que teme la noche).Durante la pandemia, Diego Capusotto escribió un libro de poesía. "Una especia de exorcismo que no tiene que ver con el humor", explica. Foto: Martín BonettoDurante la pandemia, Diego Capusotto escribió un libro de poesía. «Una especia de exorcismo que no tiene que ver con el humor», explica. Foto: Martín Bonetto

-Sí, lo leí, re oscuro…

-Fue algo típico del repliegue de la pandemia. Me dije: «En algún momento me gustaría escribir un libro de poesía». Y ese fue el momento. Creo que es una especie de exorcismo que no tiene que ver con el humor. Son micro poemas. Yo no hago humor porque soy una persona contenta y alegre. Hago humor porque tengo angustia, y la oscuridad y el humor no difieren.

-¿Qué es lo que te angustia?

-Es existencial. Independientemente de que uno tenga compañera, familia y amigos, siempre tengo algo trágico. No me ayuda tampoco el tema de la fe, que no la tengo. Y en la medida en que se van achicando las posibilidades de la existencia, aparece un lugar de fragilidad Tampoco es «Uhhh, lo mal que la estoy pasando»… Ya hice lo que hice y está todo bien, pero a su vez hay algo oscuro en la vida. Ese libro fue eso. Y eso yo lo tengo.

Evita con fusil

-Hablame de «Las corredoras». ¿Qué tipo de película es?

-Una película donde convergen varios géneros. Si viste las películas de Néstor (Montalbano), vas a ver algo que no deja de ser una historia con un triángulo amoroso. Tiene que ver con el melodrama, con personajes que parecen de Manuel Puig. Fue un material que me sirvió para investigar otro modelo de actuación.

-Tiene algo de «El Gran Chaparral», ¿no? Es como que en cualquier momento puede aparecer el alguacil…

-¡Pero no te quepa duda! Además, ninguno de los personajes (actúan Carola Reyna y Alejandra Flechner) de la película se acomoda al humor. Eso es interesante. Y hay un maquillaje muy Almodóvar, además de seres que parecen desvalidos con asma. En el repliegue del actor, en eso que tenemos que hacer cada vez que creamos un personaje, aquí yo sentí la necesidad de ver a Amelia Bence. Estudiar su tono, su manera, su gestualidad.Juego de espejos. Capusotto dice que cuando asumió el gobierno de Macri le ofrecieron seguir con su programa en la TV Pública. Foto: Martín BonettoJuego de espejos. Capusotto dice que cuando asumió el gobierno de Macri le ofrecieron seguir con su programa en la TV Pública. Foto: Martín Bonetto

-¿Sos el actor fetiche de Montalbano?

-Es factible, pero también me pasó de preferir no hacer algún proyecto con él. El viene de Cha cha cha y Todo x 2 pesos. Era el director de exteriores y después intervino en lo creativo. Nos conocemos, tenemos una amistad de muchos años. Para esta película, la primera imagen que él tuvo fue verme a mi disfrazado de Evita con un fusil. Después dijo: ¡Es Capusotto!

-Disfrazado de Evita con un fusil…

-Sí, jajaja, ahí empezó todo.

-Tu reconocimiento siempre fue a a partir del humor…

-Tal cual, esa de Olmedo que decía: «No quiero trabajar en una obra de Alberto Ure, porque no quiero engañar a mi público» ya no existe más. Yo me hago absolutamente cargo del humor y lo festejo. Festejo que mis personajes circulen entre la gente. Nunca tuve ese mambo. Yo trabajé en Tiempofinal, un ciclo de Sebastián Borensztein, donde hacía de un violador, y de eso no se acuerda nadie. Lo mismo con Sol negro, yo estaba ahí con (Alejandro) Urdapilleta,y nadie se acuerda.

No reniego ni tengo nada que demostrar. Es lo de siempre, el cómico como un estadio menor, pero bueno, andá a pedirle a Robert De Niro que haga chistes como Tangalanga…

El mejor momento y con quién no trabajar

Una imagen de la película  "Las corredoras". Aquí, Carola Reyna y Diego Capusotto. Foto: PrensaUna imagen de la película «Las corredoras». Aquí, Carola Reyna y Diego Capusotto. Foto: Prensa

-¿El mejor momento de tu carrera fue «Peter Capusotto?»

-Probablemente sí, porque incursionó en la cultura rock que nosotros habíamos transitado en la adolescencia. Además, si se quiere, estábamos un poco más maduros y pudimos trabajar con modelos de la política. Pensá que todo arrancó como un programa de videos de música y con Pedro (Saborido) nos preguntamos que pasaría si incorporábamos personajes de la cultura del rock. Uno de los primeros que apareció fue Pomelo.

-Da un poco de nostalgia. Ya pasaron como diez años del programa…

-Ocho pasaron. Ocho que no se hace. Se cortó en 2016.

-¿Se corta con Macri?

-No, y no me interesa que se arme esa victimización de que nos echaron. En realidad no fue así: cuando gana Macri yo le propuse a Pedro ir a la señal de Turner. Se lo propuse porque nos permitían hacer programas de media hora y en la TV Pública eran de una hora. Había que alargar la artística de 45 minutos y armar varios personajes para llegar a la hora de duración. Cuando ganó Macri no sólo no nos echaron, sino que el canal nos llamó para seguir haciendo el programa. Pero seguimos con la idea de Turner, porque tampoco sabíamos en qué condiciones podríamos seguir en la TV Pública.Diego Capusotto cuenta que en sus programas humorísticos se metió con todos: "Progresimo, reaccionarios, los nuestros...". Pero que nunca hizo humor militante. Foto: Martín Bonetto
Diego Capusotto cuenta que en sus programas humorísticos se metió con todos: «Progresimo, reaccionarios, los nuestros…». Pero que nunca hizo humor militante. Foto: Martín Bonetto

-Igual no quedaría mal tener una posición política, ¿no? El otro día Lola Arias, la dramaturga, dijo que no trabajaría con Brandoni. ¿Vos tenés algún límite al respecto?

-Ella dijo que Brandoni era facho. Ahí hay un problema: Brandoni no es facho. El fascismo es un movimiento de masas con supremacía racial. Solemos decir «fascista» un poco genéricamente. En todo caso, él es alguien con quien tenés diferencias, diferencias claras, porque Brandoni es alguien que odiaba a Menem, pero después esta con Macri, y Macri reivindicaba a Menem. Creo que él es antiperonista, pero no fascista. En fin, con alguna gente, no voy a puntualizar con quien, yo no trabajaría. Pero no es el caso de Brandoni. Con Brandoni yo podría discutir sobre política. Brandoni no es Astiz.

-Jajaja.

-Claro, ¿trabajarías una escena con Astiz? Y, no, le arrancaría la cabeza. Es como cuando te dicen que Borges era gorila y vos pensás: ¿es lo único que tenés para decir de Borges? El canal nos llamó. Te lo repito. Esto ya no es como en la época de los milicos. Nos dijeron: nos encanta el programa, vení y hacelo. Son los macristas que antes eran alfonsinistas y te corrían por izquierda. Bueno, ahora son macristas, amigo. Y vienen y te dicen: qué lindo programa hacés. No es que estás hablando con Massera…

-Alguna vez con Saborido conversábamos sobre si el humor no es algo que habitualmente se practica desde la “derecha”.

-Nosotros nos metimos con todos, con el progresismo, con lo reaccionario, con los nuestros: Carpa Abierta era un intelectual tipo Carta Abierta. Lo que hemos evitado es algo que yo nunca haría: humor militante.

La película está protagonizada por Carola Reyna, Alejandra Flechner y Diego Capusotto.

-¿Qué sería?

-El humor que corresponde a cierto sector político. Macanudo que lo hagan: si vos hacés un programa como El Destape, de Navarro, y ponés humor ahí, será un humor afín a un ideario político, a una línea editorial. Eso no está mal, de hecho también lo hace Lanata. Nosotros estábamos corridos. Nos metíamos con los propios y con los ajenos. El humor es un poco anarco, es irreverencia, no tiene anestesia.

-Dijiste «anarco» y pienso en el «anarcocapitalismo» de Milei. Esa pata, la anarquista digo, ¿no te generó una especie de mínima ilusión?

-No. Anarquista me refería a que el humor rompe con el molde de lo permitido. Hablaba de un lenguaje que no se puede asir. Lo digo en esos términos, no digo anarquismo como algo político. Yo siempre fui peronista, siempre pensé que la industria, el trabajo y la soberanía son lo importante.Diego Capusotto cree que el humor es un poco "anarco, es irreverencia, no tiene anestesia". Foto: Martín BonettoDiego Capusotto cree que el humor es un poco «anarco, es irreverencia, no tiene anestesia». Foto: Martín Bonetto

-En los créditos de la película aparece un agradecimiento al INCAA. ¿Eso también da un poco de nostalgia?

-Yo no sólo estoy preocupado con lo que puede ser el sector, sino que estoy preocupado con lo macro. No me preocupa lo que sólo me compete como hombre de la cultura. Estoy inquieto por el trabajo, por la soberanía, por la pobreza, por la distribución del ingreso y por el combate a la riqueza. Todo eso me da un marco de desolación.

-¿De qué estás viviendo ahora?

-De las charlas que hago con la gente que viene a verme. Vamos por las provincias, por el conurbano…

-¿Es una fantasías pensar que te llenaste de guita con la televisión?

-En televisión siempre hacés mucha plata, pero nosotros no acumulamos capital.Diego Capusotto y Alejandra Flechner, en el filme "Las corredoras". Foto: PrensaDiego Capusotto y Alejandra Flechner, en el filme «Las corredoras». Foto: Prensa

-¿Ves con buenos ojos la posibilidad de un canal de streaming?

-No sé bien qué es el streaming. No tengo redes. ¿Que sería?

-Esos canales de Youtube tipo «Olga»…

-Lo que hablamos con Pedro es que Peter Capusotto no está terminado, no tuvo un final. Ese es el mejor estadio que se puede tener. Saber si vuelve o no es algo que ahora está dando vueltas.

Fuente: https://www.clarin.com/espectaculos/diego-capusotto-desconocido-vivir-dar-charlas-escribir-poesia-aclaracion-macri-echo-tv-publica_0_i5Oh2nnAvl.html